martes, 10 de noviembre de 2015

UNA VISIÓN Y VERDADES DOLOROSAS...18ª


                                          UNA VISIÓN Y VERDADES DOLOROSAS
                                       



 Vishous y Butch Fated

Quizá todo esto es una locura. Bueno, no quizá, lo sé. Sé que es de locos y que siempre he creído que algo así no me iba a ocurrir a mí. Coño, desde que hemos llegado a lo que fuera una de las casas de Darius siempre he sentido envidia por mis Hermanos que han conseguido a sus shellan.

Síp, yo estuve a un tris de acabar comprometido con cuarenta hembras. No diré que no fueran hembras de valía, pero no iba a ser posible ser quien realmente soy. Tendría que haberme tragado todo mi puto orgullo, todo lo que soy con tal de "satisfacer" a mi madre y no estaba dispuesto a darle otro gusto más a esa maldita perra. Nope. Aún no sé cómo demonios me libré, tampoco me interesa averiguarlo.

Gruño cuando siento que me clavas tu erección contra la mía y mis ojos empiezan a brillar como si fueran puñeteras linternas. Mejor dicho, son como dos putos faros de coche. La madre que te parió. Sin darte tiempo a hacer nada más, te levanto a pulso, a pura fuerza bruta y te lanzo sobre la cama. Una cama que en mi vida he usado o he dejado que nadie usara.

Sin embargo, cuando estoy a punto de ir a por ti, mi puto móvil empieza a sonar de forma bastante irritante.

—Me cago en la puta —maldigo en voz alta mientras saco el puto aparato de mis pantalones. Wrath. Hijodesuputamadre. Descuelgo y me llevo el puto teléfono al oído—. ¿Qué cojones pasa ahora? ¿No te ha dicho Hollywood...?

—Volved al puto complejo. YA. Tenemos que hablar de la mega escapadita que se ha dado tu protegido.

Bajo el teléfono y tapo el puto micro del mismo.

—Me cago en Rhage y la madre que lo parió.

Te sientas sobre la cama y me miras confuso.

—¿Qué...?

—El muy mamón ha largado lo que ha pasado esta noche. Voy a asesinarle, te juro que lo mato. —Cierro los ojos y vuelvo a subir el puto auricular a mi oreja—. Vamos para allá.

No le doy tiempo a Wrath a decir nada más, simplemente le cuelgo.

—Volvemos al puto Complejo.

Parecía un puto adolescente a punto de correrse en los pantalones. En mi cabrona vida había tenido todas las emociones que ahora mismo me desbordaban estando debajo de tu cuerpo. La mezcla de las tuyas y las mías, me tenia loco, caliente y lujurioso por tenerte dentro de mi culo.¡¡Hostias!! no era un novato en esto del sexo y follar, solo el fade sabia porque tenia urgencia de ti,d e tu boca, de tu sexo...de ti entero.

Como un zombi oigo tu gemido cuando subo mis caderas y al segundo siguiente noto como me levantas del suelo a pura fuerza y me veo lanzado con esa misma fuerza contra la única cama en el lugar y sin abrir la boca me deje hacer. Una sonrisa ladina se puso en mi boca, saber que estabas como yo, me excitaba aun mas. La corta distancia que hay entre la cama y tu me parece un largo camino.

Un gruñido salió de mi boca, acompañado de mil maldiciones cuando el puto teléfono empezó a sonar. Me digo en silencio que no lo cojas, pero lo haces. Tu cara no presagia nada bueno. Me siento en la cama, rodándome hasta el mismo borde y capto lo que ha pasado.

La confusión deja paso al temor de que me echen de la hermandad y esta a la rabia que vuelvan a castigar a Vishous y eso si que no. Fui a coger aire y un dolor que nunca había sentido cruza mi pecho haciendo que boquee en busca del jodido aire. Genial paso del momento pasión al momento pánico, genial, si señor, pero que muy genial. Todo un machote.

— ¿Tus amigos no saben tener el pico cerrado?— le pregunto con rabia. No te dejo contestar— no voy a dejar que te vuelvan hacer daño, porque si lo hacen sacare mi lado maldito a pasear y haré de nuevo de aspiradora. Esto es solo culpa mía y lo que venga lo pasare yo solo y no me vengas con esa mierda de que eres mi Whard porque me lo paso por mis cojones—Me levante y volví a pegar mi boca a la tuya, devorándote hasta que ninguno de los dos tuvo aire.—Si esto acaba bien...tu y yo tenemos algo pendiente y no voy a dejar que salgas corriendo.

Camine recogiendo mi camiseta, la coloque en mi cuerpo de nuevo, abriendo la puerta y me seguiste en silencio. Así continuamos hasta llegar al Escalade, nos subimos, lo pusiste en marcha y antes de que pusieras tu estridente música, mi boca hablo.

— ¿Vas a decirle lo de que aspiro albinos cabrones?


Algo pendiente. Eso me queda jodidamente claro. Mierda, preferiría quedarme aquí, contigo, que tener que volver ahí y enfrentar al hijo de puta de Wrath y su estúpido monólogo. Te veo incorporarte de la cama y ponerte tu camiseta otra vez. Odio verte con tanta puta ropa ahora mismo, coño. Sin embargo no hago ningún comentario mientras recojo la mía y también me la enfundo en mi cuerpo. Ambos salimos del ático y bajamos hasta el Escalade. Me estiro un poco para poner la música y ante tu pregunta me quedo helado.

—Supongo que es precisamente por eso que el Rey nos ha llamado de vuelta. Te juro que si Hollywood está presente, va a perder sus putos huevos —gruño por lo bajo.

Sin dejarte decir nada más enciendo el estéreo y nos pongo en marcha de vuelta a la mansión.

Cuando entramos, intento escuchar con atención. Suerte para el puto Godzilla, está con su hembra. A salvo. De momento. Te hago una señal para que me sigas y subimos las escaleras que nos llevarán al despacho de Wrath y abro la puerta sin siquiera llamar antes. A tomar por culo las cortesías y la puta buena educación.

El otro macho nos está esperando con su culo apoyado contra su escritorio. Síp, esto no presagia nada bueno.

—Al fin os dignáis a aparecer —comenta de forma mordaz. ¿Así que vamos a empezar con esas?

Le miro fijamente, mi mano enguantada apretada en un puño, haciendo que el cuero que la recubre cruja peligrosamente.

—¿Qué cojones pasa ahora? —suelto sin el más mínimo atisbo de tacto o respeto. Él no ha respetado mi... nuestra intimidad, así que yo no se lo debo a él.

—Esa boca —suelta el Rey, apartándose del escritorio. Mira al poli y puedo sentir cómo frunce el ceño—. ¿Qué ha pasado? Havers me llamó.

¿¡Havers!? Oh, sí. Creo que esta noche el medicucho va a pasar lo que le resta de vida en el puto Fade acompañando a su difunta shellan.

—No fue nada —digo encogiéndome de hombros—. El poli necesitaba tomar el aire, nada más.

—Tomar el aire —le oigo pronunciar arrastrando las palabras—. ¿Junto a un montón de albinos antes de zampárselos a todos?

Me tenso por completo y puedo sentir la incomodidad que irradia el medio symphath a mi lado.

—Fue una casualidad. Le encontramos en nuestra ronda y él me llamó para avisarme de dónde estaban esos hijos de perra.

¡Vivan las mentiras, joder! Y, qué coño, soy bueno en ello. Wrath me mira por un instante. Bueno, más bien lo adivino ya que sigue llevando esas gafas de sol envolventes y jodidamente oscuras.

—Si te preocupa lo que ha pasado, no lo hagas. Estoy intentando averiguar qué es lo que ha pasado —comento como quien no quiere la cosa.

—De hecho... —Un estremecimiento me recorre por entero y me giro como si me hubieran dado un puto latigazo. La figura de la Virgen Escriba flota justo al lado de Butch, el cual también ha saltado y se ha apartado un par de pasos de ella. Inteligente por su parte, sinceramente. Siempre que esa zorra aparece no son muy buenas noticias—. Yo puedo explicar eso.

De camino a la casa, mil preguntas danzan en mi cabeza pero entre tanta maraña de preguntas sin respuestas, esta el deseo, las ganas y mi polla dura que tira en mis pantalones, solo con oler al macho a mi lado. Una mano cobra vida y se dirige hacia su rodilla ,la paro a medio camino y la vuelvo a la mía. Me limito a escuchar esa ruidosa música que le gusta ,a aspirar su aroma y fundir mis cerebro en todo lo que ha pasado en su ático, hace unos minutos. Coloco en mis labios una sonrisa.

La cual se va evaporando a medida que el camino hacia la mansión se acorta. Llegamos y mi bestia empuja para querer esta en al fiesta y me niego ,no es momento, ni lugar. Noto como V se tensa, su entrecejo se frunce y la mala leche lo baña de los pies a la cabeza. Su olor de la rabia, es tan fuerte como todo en él. Respiro y decido, que mejor mantengo la boca cerrada y voy por detrás de su persona. Por primera vez, al hacer esto, no me siento como un puto esclavo sexual, eso es bueno....mmmm creo.

Al entrar en el despacho, el olor del rey me echa para atrás, cabreo, rabia, enojo y no saber que hacer salen a chorros de su esencia, bañando el lugar. Su mirada ciega detrás de las gafas se clava en mis ojos y le mantengo desafiante la mirada. Si me voy será, por la puerta grande y la cabeza muy alta.

En ningún momento Vishous me deja hablar o participar. Se ha vuelto mas desafiante y no mide como habla con el rey, su puta madre ,a ese paso se esta ganando una patada en los huevos y algo mas. Wrath,se vuelve amenazante y yo me incomodo hasta el punto que paso mi peso de un pie a otro varias veces. Roto mi cuello y las vertebras crujen.

Me atraganto con las mentiras del vampiro y sonrío de medio lado, bajando mi cabeza. Tomo nota, que ese doctocirto es un cabrón chivato, lo de Rhage, lo puedo entender, se preocupa por su hermano.

Mi nuca hace correr un rayo de advertencia por mi columna en el momento que una voz surge y un fogonazo de luz se cuela a mi lado del despacho. Un gran paso y me aparto, mirando al figura flotante y encapuchada. Miro al rey y a Vishous, haciendo la muda pregunta, con sonido.

— ¿Quién coño es este fantasma?— gruño y me aparto de ella, todo lo que pueda. La vuelvo a mirar y le grito mas con pánico que con prudencia— Si vienes a por mi culo, será sobre mi cadáver...zorra

Lo que fuera que estoy a punto de soltar se me queda atascado en la garganta ante lo que el muy imbécil le suelta a la Madre de la Raza. A MI madre, me recuerdo. ¿Fantasma? Tiene un pase. ¿Zorra? Nope, ni hablar.

En un abrir y cerrar de ojos ella se baja su capucha y la energía que la figura irradia es acojonante así que antes de que pueda dar un paso —o levitar, valga la redundancia— hacia el medio symphath yo ya estoy entre ambos.

—Disculpe su ignorancia, oh, Gran Madre de la Raza —digo entre dientes mientras hinco una rodilla ante ella—. Hace poco que está entre vampiros y no he tenido la oportunidad de hablarle sobre vos.

De forma poco disimulada, echo una mano hacia atrás y tiro de ti hasta que hincas una rodilla sobre el suelo.

—Agacha la puta cabeza, imbécil —te gruño por lo bajo—. Estás ante la Virgen Escriba, nuestra jodida creadora.
Aun ando asimilando que esta pasando cuando el vampiro corre a situarse entre esa cosa y yo. De reojo veo, como el rey se levanta de la silla, para hacer lo mismo y V tira una mano hacia atrás ,tirando de mi hasta que consigue que acabe con una rodilla sobre el suelo, lo que me hace gruñir bajo. Me ordenas que baje la cabeza en un gruñido por lo bajo y lo hago, y te digo de la misma forma.

— Yo pensé que ibas a pedir que te la chupara— tu gruñido sube dos tonos y te hago caso, bajo mi cabeza.

Veo unos pies que no son pies, es el bordillo de una túnica delante de mi y esa cosa o lo que sea habla.

— Un macho con sentido del humor, pero osado y sin una molécula de respeto,  no me gusta y si quisiera tu "culo" symphath lo tendría sin tener que pedir permiso y solo para que veas hasta donde llegar mi poder...

Silencio, mi vampiro, vuelta con el mi, se tensa y sus puños se cierran en puños bien apretados. El rey musita en la misma posición que nosotros un por favor y mi garganta se cierra como si unas manos me estuviesen apretando, caí de espaldas al suelo y mi cuerpo se elevo unos centímetros arriba del suelo.

Peleaba por mi vida, intentando quitar lo que cojones aferraran mi garganta, no dejando pasar el aire. Mi pecho ardía y mi corazón iba a una velocidad brutal. Mi vista se volvía borrosa y mi conciencia se iba a tomar por culo. La luz iba despareciendo y mi cerebro iba entrando en un hoyo de oscuridad, cuando caí al suelo de golpe y tosí buscando ese aire que necesitaba. Sentí una mano de mi vampiro, vuelta con el puto mi, mientras jadeaba y tosía. Su cara se coló en mi frente, mientras mis ojos se intentaban enfocar y su voz me puso el poco vello de punta.

— Aprenderás, por los buenas y las malas, que me debes respeto y obediencia, no solo porque sea la Virgen Escriba, sino porque en un futuro seré tu suegra, si vives para ello.

Se giro hacia V.

— Enseñalo, hijo, o vuelves a ocupar el sitio de Phury, pero en mis dominios. Y tu Wrath, ocúpate que así se haga.

Entre las nieblas de recuperar el aire, la palabra hijo se coló en mi cerebro ,en el momento que Vishous gruñía como un animal y el rey se levantaba para detener su avance hacia esa cosa. Mi suegra, ni muerto, prefería una gallina, detuve mis pensamientos, no fuera que los leyera.

Esa... ¡¡zorra!! Me levanto justo cuando Butch es tirado sobre el suelo después de esa "hermosa" demostración y lo que la muy hija de puta suelta me cabrea como las monas. A la mierda el respeto, a la mierda la servidumbre y la jodida humildad. Siento la mano de Wrath que intenta detenerme pero me zafo de ella con extrema facilidad.

—Hija de puta —escupo—. ¿Hijo? ¿¡Hijo!? ¿Tengo que recordarte lo que hiciste conmigo cuando apenas era un crío? ¿Tengo que refrescarte la memoria para que vuelva a tu mente dónde viví o con quién o cómo lo hice? —Wrath maldice por lo bajo y ella me mira fijamente—. ¿Fui tu hijo entonces? ¿O sólo lo soy cuando a ti te da la real gana o cuando te conviene? Y te recuerdo que Phury aún no ha dicho que sí a lo que le propusiste aunque al principio se ofreciera. Así que, créeme, creo que estás jodida con lo del puto Primale porque yo no voy a acceder. Ya te lo dejé lo suficientemente claro. Antes me hago una puta vasectomía. Ahora, si ya te has divertido lo suficiente, "mahmen" —suelto destilando pura ironía en la última palabra—, ¿vas a decirme qué cojones pasa con Butch o tengo que sonsacártelo a base de golpes?

Nada detiene al vampiro, que suelta por esa boca cosas que no había podido ni ver cuando para ayudarme me dejaba entrar en su cabeza. Siento que me necesita y eso cubre mi cuerpo de calidez, vale se que es inconsciente, porque esta perdido en su rabia, pero esa necesidad de mi, me gusta. Aparta de malos modos al rey y tiendo una mano para que me ayude a levantar. Cuando lo hago me pongo detrás de Vishous y que mi calor de llegue.

Froto con una mano mi garganta y solo escucho, sintiendo como mi corazón se oprime por el aroma picante y explosivo que suelta V,habla mientras se ahoga en su propio dolor. Otro aroma no menos doloroso, llega a mi y se que es de ella, pero a mi no me preocupa ella,l o hace el.

Vishous acaba de despotricar y un tenso silencio se levanta. Unos minutos después, ella habla,s u tono ha cambiado, pero paso de descifrar. Ahora si que me pego a mi vampiro, mierda con el mi, y poso una de mis grandes manos sobre su hombro.

— Había previsto esto. No fue casualidad que mi hij...que el guerrero llamado Vishous se encontrara contigo en la Colonia. Estaba escrito, tuve una visión de los dos juntos, siempre. Tu Butch, eres oscuridad y V la luz. Vuestras vidas están ligadas. El guerrero necesita tu oscuridad para que su luz no se apague y lo mate. Tu shympat, necesita de tu luz, para sanar tu oscuridad y tu vida no cese. No solo vuestras vida os pertenece a vosotros, también la de cada uno al otro, al igual que vuestras almas. Hay un largo y tortuoso camino hasta el final ,no será fácil, pero es vuestro destino. Separados moriréis, juntos seréis eternos, porque hasta el Fade, os debe acoger juntos.

Otra pausa silenciosa que puso mis vellos en punta y me hizo estremecer, mientras tragaba las palabras, las mascaba y asimilaba.

— Recordar, si el uno muere, el otro le seguirá y la Hermandad desaparecerá por siempre.
 
La guinda, se larga y mas silencio. Varios aromas y emociones, se entrelazan con las mías.

Si antes he estado cabreado, ahora estoy iracundo. Juntos. Para siempre. No se nos puede separar.

—¡Vuelve aquí, hija de la gran puta! ¿¡Qué coño significa esto!? ¡¡Zorra de los cojones!! ¡¡Fuiste tú la que intentó esclavizarme con esas cuarenta hembras!! ¡¡Tú la que intentó manipularme como buenamente pudiste!! —A pesar de que te siento justo detrás de mí y que tu mano está sobre mi hombro, no consigo calmarme—. A la puta mierda. A la mierda contigo, con el puto Fade y con tu maldita autocompasión. Nosotros te importamos una mierda. Eres una jodida egocéntrica de mierda que juega a los Sims con nosotros e intentas hacer lo que tú crees conveniente. ¡Tramposa!

Me sacudo tu mano de mi hombro y me dirijo a la puerta sin dirigiros ni una palabra. Estoy cabreado. Muy cabreado y lo último que necesito es tener a alguien a mi alrededor.

Salgo al pasillo y bajo las escaleras de cuatro en cuatro. Abro la puerta principal de la mansión y tomo una bocanada de aire para después soltarlo en un suspiro para calmarme antes de desmaterializarme a un descampado donde pueda dejarme llevar por mi ira.

Me arranco el guante y me quedo mirando la luz de mi mano por unos largos segundos antes de empotrarla contra un árbol haciendo que este estalle en llamas. Hago lo mismo con la hierba seca del suelo, destruyendo todo lo que mi vista es capaz de alcanzar.

Estallas con una ira que me revuelve el estomago, odio ser tan sensible a emociones ajenas por mi puta mierda. Quiero hablar, pero no deja, te separas de mala hostia de mi y te largas sin tener en cuenta nada, sin tenerme en cuenta.

Caigo en el sillón con mi culo ,las piernas se niegan aguantarme un rato mas y con mis brazos sobre mis muslos, dejo caer la cabeza entre mis hombros. La mano del rey se posa en uno de mis hombros.

—¿ Demasiada información Butch?

Levanto mi cabeza y lo miro.

— No sabia, cuando me ayuda dejándome entrar en su cabeza, no reviso lo que no debo, tengo honor. La información no me preocupa, sus emociones si, ahora mismo es una bomba de relojería.

Noto la incomodidad de Wrath y como masaje a el puente de su nariz, levantando las gafas, carraspea y me hace la pregunta incomoda.

— ¿Has bebido de su vena?

Asiento y se arrodilla delante de mi, mirándome detrás de su ceguera, levantando sus gafas. Era una mirada que te llegaba al alma.

— Dale unos minutos y ve tras el.

Sin mas me quedo solo en el despacho y pienso en las palabras de esa zorra y no puedo evitar sonreír .Juntos para siempre ,me va pareciendo una muy buena idea y me esta gustando. Unos minutos después, salí hasta el jardín, lo busque y me evapore hacia el.

Cuando me materialice, un calor sofocante y lleno de humo me rodeo, solo hay fuego a mi alrededor y Vishous, esta en medio de un circulo que se iba cerrando. Me desmaterialice hacia ese lugar, volvió hacer material, lo agarre por el pecho, en un abrazo y me evapore con el hacia el jardín de la gran casa.

Había dejado al descubierto, otro de mis poderes, pero no me importaba, también lo iba a pagar caro, pero me daba igual. No quería soltarlo pero la debilidad por el gran esfuerzo me pasaba factura cayendo redondo sobre la hierba y convulsionando.

Voy quemando lo que quiera que voy encontrando y miro a mi alrededor con cierto aire satisfecho al ver que estoy completamente rodeado de fuego. Qué forma más buena de largarme de aquí para siempre, joder.

Levanto mi mano y la miro fijamente. Síp, a veces es jodidamente útil. Cierro los ojos y levanto mis brazos, dando una vuelta sobre mí mismo. Bueno, si este es el fin pues que así sea. A la mierda la raza que mi madre parece querer tanto. Eso le pasa por cabrona.

Sin embargo llega un momento en el que siento que alguien se materializa en el mismo descampado en el que estoy, pero no abro los ojos. En un momento dado siento que me esparzo por el aire sin que yo lo haya deseado y cuando mi cuerpo se vuelve a unir oigo cómo algo se desploma a mi lado.

Abro los ojos para ver a Butch tirado sobre el suelo y al instante siguiente está sacudiéndose como un puto pez fuera del agua. Oh, mierda, ¿una crisis? ¿Crisis de qué exactamente? ¿Y cómo cojones he llegado aquí cuando estaba a punto de achicharrarme?

—Mierda. ¿Butch? Eh, campeón, vamos... —Me agacho y te coloco sobre tu costado, esperando a que se te pasen las putas convulsiones y asegurándome de que no te muerdes la lengua cual idiota.

Mientras me muevo como un muñeco poseído, no dejo de pensar en ti, de oír tu voz, de sentir como me pones de costado, como evitas que me muerda la lengua y me alegra. Tu preocupación me llega y me gusta, es el precio que pago cada vez, que hago esa locura. Convulsiones siendo consciente de todo lo que sucede a mi alrededor.

Diez minutos, después, me calmo y caigo de espaldas, mirándote, tu muda explicación se lee en tus ojos. Te tengo de rodillas a mi lado.

—.Si, puedo cargar a otro, cuando me evaporo, pero luego pago con estas malditas convulsiones, durante minutos.— me siento y te miro— la próxima vez que decidas irte al Fade de los cojones, recuerda que mi vida esta ligada a la tuya y que mira tu por donde y después de muchos siglos, me esta gustando vivir.

Tire de tu solapa y te lleve a mi boca, devorándola con hambre. Que te deseaba era un hecho visible y muy palpable, pero debíamos hablar de todo lo que había sucedido en el despacho del rey. Me levante con tu ayuda,q uedando frente a frente.

Por encima de tu hombro veo la piscina y una malvada idea cruza. Te agarro, te pongo sobre mi hombro y corro cayendo a la piscina contigo.

Respondido el por qué estoy de vuelta en el Complejo, tiras de mi camiseta mientras nuestras bocas chocan. Joder... esto me recuerda lo que nos obligaron a dejar a medias en mi ático. Sin embargo, tan repentinamente como te has lanzado a por mí, te apartas y antes de darme cuenta estás... cargándome en tu hombro e incluso antes de que pueda lanzar alguna protesta al notar tus intenciones, ambos caemos dentro de la puta piscina aún vestidos.

Cuando logro salir a la superficie suelto:

—Hijo de puta. ¡¡Me has lanzado al agua, so cabrón!!

Me afianzo con los pies en el suelo de la piscina y pongo mis brazos en jarras, después de echar mi pelo hacia atrás y río a carcajadas. Te atraigo hacia mi y lamo tu cuello, subo en lamidas hasta tu oreja y muerdo tu lóbulo, siseando.

— Es de noche, falta para que el sol haga presencia, es un buena noche y tenemos algo pendiente ,mi vampiro.—Te quito la chaqueta dejándola sobre el muro y te llevo a la parte menos honda.— Además apestabas humo macho.

Suelto una carcajada, antes de comerme tu boca con hambre.







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