TÚ Y YO
Cuando me das tus noches. Yo me preparo para darte mis días.
Mi amor y mi pasión tienen nombre y su nombre se escribe con
la V de valiente.
Es tan fuerte lo que siento por ti que sacas la bestia que hay en mí.
Con solo olerte o sentirte u oler el humo que suelta tu liado y es no
poder mantener mis manos lejos de ti.
Dejo de ser un irlandés devoto y cristiano para ser un animal sexual
cuando ese cuerpo de macho me deja hacerlo mío y poseer su cuerpo,
su corazón y su alma. Cuando te hago mío no tengo cordura, pierdo la
sensatez y me vuelvo un adicto a tu olor y tu sabor.
Cuando mi cabeza se pierde entre tus piernas tu sabor dispara todo
pensamiento coherente y me vuelvo una fiera desatada sin control.
Cuando te cabalgo lo hago con fiereza, con apremio, con ganas, con
el deseo recorriendo todo mi ser. Y cuando tu orgasmo se enreda con
el mío, los dos cuerpos se tensan y estallan. Tú gritas mi nombre y yo
pronuncio el tuyo en una letanía falta de aliento
Ya solo tengo calientes pensamientos de follarte de pie, desde atrás,
contra la pared, en el suelo, en la ducha. De lado, en la cama, sobre la
mesa de la cocina, bajo el manto de la lluvia, después de una noche de
pelea. Cuando te veo mover, te oigo reír. De mil formas te haría mío.
Me pone que me cabalgues y yo deje mis uñas marcadas en tus caderas,
en tu espalda, en todo tu cuerpo. Me pone que nuestros sudores se
mezclen, que nuestros alientos jadeen, que nuestros gemidos se callen
con besos llenos de pasión y saliva.
Mi amor y mi pasión tienen nombre y su nombre se escribe con
la V de valiente.
Es tan fuerte lo que siento por ti que sacas la bestia que hay en mí.
Con solo olerte o sentirte u oler el humo que suelta tu liado y es no
poder mantener mis manos lejos de ti.
Dejo de ser un irlandés devoto y cristiano para ser un animal sexual
cuando ese cuerpo de macho me deja hacerlo mío y poseer su cuerpo,
su corazón y su alma. Cuando te hago mío no tengo cordura, pierdo la
sensatez y me vuelvo un adicto a tu olor y tu sabor.
Cuando mi cabeza se pierde entre tus piernas tu sabor dispara todo
pensamiento coherente y me vuelvo una fiera desatada sin control.
Cuando te cabalgo lo hago con fiereza, con apremio, con ganas, con
el deseo recorriendo todo mi ser. Y cuando tu orgasmo se enreda con
el mío, los dos cuerpos se tensan y estallan. Tú gritas mi nombre y yo
pronuncio el tuyo en una letanía falta de aliento
Ya solo tengo calientes pensamientos de follarte de pie, desde atrás,
contra la pared, en el suelo, en la ducha. De lado, en la cama, sobre la
mesa de la cocina, bajo el manto de la lluvia, después de una noche de
pelea. Cuando te veo mover, te oigo reír. De mil formas te haría mío.
Me pone que me cabalgues y yo deje mis uñas marcadas en tus caderas,
en tu espalda, en todo tu cuerpo. Me pone que nuestros sudores se
mezclen, que nuestros alientos jadeen, que nuestros gemidos se callen
con besos llenos de pasión y saliva.
Tan opuestos pero tan iguales. Dos corazones rotos a base de golpes
de la vida. Dos almas castigadas por fieros recuerdos. Dos meros
espectadores de la vida, viéndola pasar. Dos sedientos sin agua donde
calmar esa sed. Dos cabrones que no tenían ni idea del significado de
la palabra amor. Dos pervertidos que quemaban el deseo, él uno con
putas y el otro con sado. Dos zombis que ahogaban sus penas en puro
alcohol. Dos que se buscaban sin saberlo, hasta que se encontraron.
Y ese día el universo se alió para que al fin dos fantasmas que andaban
por el mundo se encontraran.
Pero esa es otra historia de amor.
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